Una etapa obligada, a mi parecer; hablo del ingresos de nuestros hijos al colegio o maternal; cuando somos madres casadas las decisiones con respecto a nuestros hijos no las tomamos solas.
Cuando deje el
mundo laboral lo hice para dedicarme completamente a mi hijo pero ahora mi
esposo me pidió inscribir a mi bebe en un maternal, ¡No entiendo! me
resistí por mucho tiempo hasta que me di cuenta que el niño estaba tomando
costumbre de personas adultas y que no le gustaba jugar con niños de su edad,
tenía un comportamiento egoísta y hasta mordía; eran posibles razones pero me resistí
muchísimo, sabía que al entrar allí comenzaría a enfermarse y efectivamente así
fue, solo tiene mes y medio y no le he podido quitarle la congestión nasal, se
y entiendo que tiene que crear anticuerpos pero en su caso no era necesario
pasar por eso; otra de las razones por la que decidí inscribirlo fue porque mi
esposo me propuso un viaje que siempre
he querido hacer ir a visitar La ciudad sagrada de los Incas en Perú y al cual
no podía ir mi bebe, recién cumple 2 años y subir la montaña con él iba a ser
muy difícil y agotador, así que la mejor manera de irnos era dejando la carga
aliviada a la persona que se quedaría con él y así solo lo atendería en las
tardes y noches, (suspire…) conoci personas super agradables y disfrute el viaje pues cuando nos casamos no
tuvimos luna de miel puede decirse que este viaje lo fue pero ¿Saben qué? Dejar
a mi bebe fue realmente agobiante, no verlo por tantos días, no escucharlo, no
tocarlo, no saber cómo estaba realmente, ¡Dios! En las noches me acostaba con
un nudo en la garganta (lloraba), deseaba que los días pasaran volando… ¡esta
es una de las cosas que no vuelvo a hacer jamás!
Al regresar lo encontré con gripe nuevamente y le dio
fiebre, no fue al colegio por 4 días, desde entonces lo tengo tan consentido y
apegado que retrocedió, ahora no quiere volver al maternal se va llorando, las
maestras dicen que los días que no estuve el no lloraba por mí, ¡claro no me
estaba viendo! A lo mejor no está bien lo que estoy haciendo pero es hasta
ahora mi único hijo, tengo que consentirlo y amarlo, se lo demuestro y digo
todos días. Seguirá asistiendo a la guardería
pero insisto para mi ¡es una etapa obligada!
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